24 ago 2012

Banco malo, gobierno malo, insurrección buena.


Yo no me trago la deuda. No trago con una deuda que no nos corresponde y que nos va a cambiar la vida, no es ninguna exageración: los españoles tardaremos años en levantar cabeza al tener que pagar, prioritariamente de nuestros impuestos, una astronómica deuda que se sabe nominativamente a quien corresponde. La troica, la UE el FMI y BCE que representan, exclusivamente, los intereses del capital nos endosa una fétida deuda de la que hablan mañana tarde y noche por boca de nuestro gobierno. Para empezar por el principio tendríamos que remitirnos a “la seguridad jurídica” que tanto apelan los bancos y multinacionales. La seguridad jurídica es el altar del capitalismo, sin esta seguridad no hay negocio que valga, no hay contrato que se pueda suscribir, ni pacto al que llegar. Simplifiquemos la seguridad jurídica en un solo aspecto: la deuda, para que se pueda considerar deuda requiere de tres requisitos, que sea exigible, que sea liquida y esté vencida. Por lo tanto, ninguno de los tres requisitos nos corresponde empezando por el primero de los citados que excluye a los demás, nada nos vincula para que la deuda sea exigible al pueblo español. Le corresponde a los bancos que se emborracharon de otorgar préstamos con garantía hipotecaria para de inmediato empaquetar la titulación en cédulas hipotecarias y colocarlas en los mercados financieros una vez que habían agotado los depósitos de los clientes que era con el capital que tenían que trabajar. Fue la ambición, mezquina, de los banqueros para superar a sus competidores y adjudicarse estratosféricos bonus ya que aparentemente la entidad crecía por la vitamina hipocalórica del endeudamiento lo que les llevó al desastre más absoluto.

Yo no me trago la deuda. La deuda, y aquí sí que se cumplen todos los requisitos, la tienen cada uno de los bancos que emitieron las cédulas hipotecarias y las colocaron en el mercado financiero, estas cédulas tienen en letras bien puestas el nombre de la entidad que recibió, en su momento, el dinero correspondiente, por lo tanto le es exigible. El requisito liquido (se refiere a que la cantidad reclamada debe ser exacta) figura en la cédula con sus intereses correspondientes, y por último, el requisito vencimiento también figura, si está vencido será exigible, de lo contrario no será deuda hasta el día del vencimiento. No hemos tardado tanto en poner las cosas en su sitio cuando te acompaña una razón apabullante, lo que cuesta entender es como estos cabrones que van en limusina nos endosan su deuda y esperan que nos la traguemos sin más. Tenemos casi seis millones de parados que se dice pronto, una recesión que está hundiendo el país ¿Encima tenemos que tragar una deuda monstruosa que corresponde a unas entidades financieras que no han tenido la decencia de mantener a la gente en “su” propiedad mientras amaina la tormenta? Ni locos, si aceptamos la deuda nos merecemos el calificativo de borregos, los de la limusina tienen un repertorio variado de soluciones amparados en la seguridad jurídica que va desde la más razonable: que los tenedores de cédulas exijan su cobro, si está vencido, al deudor que responde con el grueso de todas las hipotecas concedidas e incluso con todos los bienes del banco emisor. No les interesa, quieren dinerito fresco, cantante y sonante, en lugar de pisos, con bloques enteros, casas, con urbanizaciones donde nadie va ir a vivir y naves industriales en polígonos que no hay industria por muchos años. ¿A nosotros, los españoles, que coño nos importa si han hecho una mala inversión? Lo que viene a continuación no me importará repetirlo mil veces.


Evolución de la deuda soberana que se dispara con la crisis financiera de 2007
Yo no me trago la deuda. Después de este entrante el plato fuerte. Un gobierno así no merece que nos gobierne ni represente ni nada de nada y que además no nos venga con el cuento que Rajoy es el que manda y que el país mantiene su soberanía, una mierda (quizás estoy más enfadado de la cuenta, continúo). Cuando se empezó a hablar de la dichosa deuda se hablaba de la deuda soberana, es decir de deuda pública, luego apareció la dichosa prima de riesgo de la que nadie había oído hablar. Alguien, así por lo bajini, dijo que no toda la deuda era pública que había también deuda privada, pero lo dijo muy bajito y los medios de comunicación, al servicio de sus amos, lo pasaron por alto. La cosa se fue encabritando y cada vez se pagaba un tipo de interés más alto por los bonos que emitía el Estado español. Los especuladores ya habían calentado el mercado y se iniciaba el desplume del pardillo estatal que le caían tipos de interés del 6 o 7% que por el volumen que tomaba la deuda se llevaba una buena parte de los ingresos del presupuesto nacional. ¿Cómo calientan el mercado los de la limusina? Pues, especulando con la imposibilidad del pago de la deuda a la que acumulan la privada en un mercado secundario que en otra ocasión hablaré para no perder el hilo de lo importante. Me preguntaba, en referencia de la seguridad jurídica, como demonios se lo iban a montar para endosar a la deuda pública la astronómica deuda privada que en su montante asciende a 1,8 billones de euros de la que 0,8 es pública, de la que adjunto dejo un cuadro de su evolución que se comprueba la incidencia que ha tenido desde la crisis financiera iniciada en el año 2007, el resto, un billón es privada. La deuda privada, la de los bancos, tiene una documentación, las cédulas hipotecarias y la pública los bonos del Estado. La pregunta tenía su intríngulis ¿Cómo demonios iban a sortear la seguridad jurídica de para meter en un mismo saco peras y manzanas? Me explico a continuación.
Yo no me trago la deuda. Se las saben todas, meter en un mismo saco peras y manzanas y decir que todo son peras, no cuela, mejor olvidarse de las peras y las manzanas y tomar las de Villadiego por vericuetos donde se pueda vestir el muñeco. La troica, por sus andurriales impone la hoja de ruta en el Memorándum de Entendimiento (manda huevos que nombres se les ocurren) donde asigna las condiciones para aportar los 100.000 millones de euros para la recapitalización de la banca. El gobierno debe de constituir la Compañía de Gestión de Activos (AMC por sus siglas en inglés), vamos, el banco malo. Estos cabrones tienen su argumentario, se trata de “restaurar y fortalecer la solidez de los bancos españoles” sin distinción, buenos, malos viables e inviables, todos a una como en Fuenteovejuna y en el mismo rollo enfatizan que se trata de “minimizar el coste de los contribuyentes en la restructuración” ¡Serán cabrones! Se burlan de toda una nación, ¿minimizar qué? Cuando se trata de endosarnos una deuda que en la situación que está el país lo hunde. ¿Qué demonios es el banco malo?: Atención a ésta respuesta. El banco malo es el procedimiento legal, que han encontrado como Jordán purificador, para convertir la deuda privada en pública. Meten en un mismo saco los activos tóxicos e inmobiliarios de todos los bancos a mogollón para que en un todo revuelto se pierda el rastro de a rio revuelto ganancia de pescadores. Sigamos con la maliciosa hoja de ruta, y con los 100.000 millones adjudicados como deuda pública, es decir que se acumula a la deuda soberana. Entonces, se les regala a los bancos como preludio de la obligatoriedad de la constitución del banco malo y el pago de los vencimientos inmediatos que la banca extranjera tiene en sus manos. En noviembre, cuando esté constituido el banco malo ya no habrá problemas con los siguientes vencimientos ya que los bancos arruinados se habrán saneado, con el Jordán purificador, al sacar fuera de su balance contable el inmobiliario que los lastra. Muy bonito, pero que muy bonito, el populacho se hace cargo de la astracanada de los bancos.

Yo no me trago la deuda. La alquimia de endosarle la deuda a otro e irse de rositas con la bendición de la troica y la aprobación del gobierno, es simple y llanamente una chaladura. La clave de ésta macro estafa está en el precio que se le asigne a los inmuebles traspasados, establezcamos dos situaciones a) que se transfieran a precios de mercado, cuando resulta que no hay mercado ya que está muerto, la única referencia que hay son ofertas de inversores, nacionales y extranjeros, que exigen rebajas en el precio del 60%. Si fuera así, aunque los bancos tengan provisionado en 20% les faltaría todavía un 40% que los quiebra, no será así. Vamos por la b) que se transfieran a “precio razonable de mercado a largo plazo” según se puede extraer del Memorándum de Entendimiento, es decir a un precio gaseoso sostenido por la espuma del champán que se van a tomar a nuestra costa: un precio fuera de mercado. Entonces la pérdida se la va a llevar el banco malo, que no solamente es malo sino que además es tonto. El término tonto bascula: o se lo lleva el banco o nos lo llevamos nosotros. Aquí hay donde elegir. Voy hacer unos números patateros para aproximarme al “precio razonable de mercado a largo plazo”, en un entorno de recesión los precios no llevan una tendencia de subir sino todo lo contrario. Adquirir ahora a un precio esperado a largo plazo (ellos mismos calculan que serán necesarios 10 años para poder deshacerse de la patata caliente) habrá de tener en cuenta los siguientes gastos: 1) IVA e inscripción en el Registro de la Propiedad 8%, 2) intereses anuales al 4% total 40%, gastos de la comunidad de vecinos, derramas e impuestos municipales 1,5% total 15%Un 60% más del precio chungo que se transfiere ¿encontrará comprador dentro de 10 años en un ambiente de recesión económica? ¿Hay alguien que se lo cree? El diferencial entre el precio real que se pueda vender y el precio chungo ira a las espaldas del banco tonto y además se tendrá que añadir un 60% por gastos. Hay tambien la posibilidad de ingresos como el alquiler, de esto hablaremos en otro momento. Realmente, tú ¿Estás dispuesto a pagar esa deuda? Conmigo que no cuenten.

“No pagamos la deuda y aquí estamos” 

Hace unos días Mitoa Edjang me invitó a participar en su programa de radio El Vortice – Unión Madrid estuvimos hablando, más de una hora, en compañía de José Luis Tejero http://www.ivoox.com/ataque-al-poder-lo-debes-saber-de-audios-mp3_rf_1383235_1.html sobre la situación en que se encuentra el país. Contestaba a sus preguntas lo mejor que sabía y al final de la entrevista salió el tema de la deuda: manifesté mi opinión de no pagar una deuda que no nos corresponde. Al parecer, para algunos, que respeto su opinión, dejaron comentarios de este estilo: “Me decepciona mucho haber escuchado atentamente a esta persona (José Manuel Novoa) en este programa de radio para que al final me salga por peteneras con lo de “no vamos a pagar la deuda”. Por otra parte, en el Facebook de Democracia Real Ya (DRY) recogían la negación al pago entrecomillando así: “No pagamos la deuda y aquí estamos” que parece más desafiante. Entre las peteneras y aquí estamoshay un abismo. Creo que los que se acomodan a pagar la deuda les preocupa que pasara el día después de dejar plantados a los acreedores y para prevenir situaciones embarazosas es mejor evitarlas aunque represente dar un paso hacia atrás. En esta dicotomía, aceptar o negar el pago de la deuda, se hace necesario calibrar ventajas e inconvenientes. Tenemos un espejo donde mirar: Irlanda. El problema irlandés, por volumen, no es comparable con el español pero la medicina aplicada es la misma. Al gobierno irlandés la troica le extendió la receta de constituir un banco malo en 2009 la Agencia Nacional de Gestión de Activos, con el mismo cometido de su primo hermano español la Compañía de Gestión de Activos y el mismo rollo que todo lo hacen por nuestro bien y que hay que poner dinero público. ¿Qué ha pasado en Irlanda en estos años funcionado el banco malo? Pues que la cosa ha ido a peor: Irlanda ha quebrado y los bancos también, dicho de otra manera: la insolvencia bancaria ha acabado quebrando al Estado. La receta que se aplica es una receta equivocada sólo pretende que los acreedores puedan cobrar la deuda utilizando todas las artimañas posibles al camuflar un diagnóstico de insolvencia por otro, sacado de la manga, al exhibir que se trata de una momentánea falta de liquidez. Más claro, camuflan una quiebra, ya que el cobro de la deuda les resultaría incierto, y lo presentan como una falta de liquidez que, con camuflaje de legalidad, lo resuelven con un intercambio de cromos. “Yo me voy con el dinerito y tú Estado te quedas con los tochos”. Cojonudo, si lo aceptamos somos idiotas.

Sin tener a mano una de estas bolas de cristal que predicen el futuro me arriesgo a hacer un pronóstico y de paso trato de dar contestación a los más reacios a dejar de pagar la deuda. ¿Qué pasará el día que el pueblo español salga a la calle o marche hacia el Congreso de los Diputados con un solo lema “Yo no me trago la deuda”? Hago una pausa de unos segundos para que cada uno de los lectores que han llegado a este punto de la narración dé una contestación. Prosigo, la mía no es otra que será noticia de portada a nivel mundial, podrán decir que llega la verdadera spanish revolution. Titulares de este estilo: Los españoles rechazan masivamente el banco malo. ¿Qué no nos podremos financiar en un futuro inmediato? Puede ser o más bien vamos de sobrados no atendiendo los intereses de la deuda y los vencimientos que continuamente nos caen. Una buena parte de las emisiones de deuda sirve para refinanciar la que vence, es decir un crédito para pagar otro crédito. “Yo no me trago la deuda” ¿Es la excusa del mal pagador o la razón del que se niega a pagar lo que no le corresponde? No hay duda que la sociedad civil europea estará con nosotros estará con la razón apabullante de que existe un límite en la socialización de las perdidas, incluso la mafia tiene una máxima “cliente muerto no paga”. La troica va más allá, “antes quebrará el país que los bancos”. Imposible darles este gustazo sin oponer toda la resistencia posible.

Ahora, una vez aportado unos cuantos argumentos para eludir la plaga que nos viene encima me voy a referir al entrecomillado que DRY rescató de la entrevista en El Vortice: “No pagamos la deuda y aquí estamos”, lo podemos decir con la cara muy alta, “aquí estamos”, nosotros, los españoles pagaremos hasta el último céntimo lo que nos corresponda como nación, y visto lo visto tendrá que ser después de una auditoria que elimine la deuda odiosa. Dejo el asunto de la deuda odiosa para otro post, aquí sólo un par de líneas extraídas de Wikipedia Deuda odiosadeuda execrable o deuda ilegítima, en Derecho internacional, es la teoría jurídica, puesta en práctica numerosas veces a lo largo de la historia, que sostiene que la deuda externa de un gobierno contraída, creada y utilizada contra los intereses de los ciudadanos del país, no tiene por qué ser pagada y por tanto no es exigible su devolución ya que los prestatarios habrían actuado de mala fe, a sabiendas, y por tanto dichos contratos —bonos o contratos comerciales— son nulos legalmente”.Anticipo que es deuda odiosa el déficit de la tarifa eléctrica que asciende a 24.000 millones de euros cargados a la deuda pública por los próceres de la nación. Estoy a la espera que el gobierno mueva ficha con la reforma eléctrica para publicar una sorprendente investigación que pone en evidencia que nos han estafado. Vuelvo, al “aquí estamos” ¿Qué pasará con los tenedores de bonos del Estado español cuando surjan nubes de tormenta y el personal se rebote en no pagar la deuda? La lógica se impone. Se sacaran de encima los bonos con pérdidas, cada día que pase, si la oposición al pago es firme, les obligará a los bancos acreedores a buscar alternativas, que las hay. La más razonable es cambiar las cédulas hipotecarias por acciones de los bancos deudores. El Deutsche Bank, por ejemplo, podía ser el máximo accionista de Caixabank, o el BNP Paribas del Banco Popular y tener asiento en el consejo de administración con la presidencia inclusive. ¿Nos importa, a los españoles, que los bancos patrios hablen en su consejo alemán o francés?

Para acabar unas píldoras que ponen de manifiesto como la troica, los de la limusina y el gobierno le dan vueltas y vueltas al asunto para salirse con la suya sin que se note demasiado. El artefacto del banco malo ¿Qué será? Un fondo de inversión, no. Nadie en su sano juicio invertirá en un fracaso cantado para dentro de 10 años. Un banco, ni hablar. Si tuviera la ficha y la estructura de un banco se podría financiar con el Banco Central Europeo y estaría obligado a los requisitos de capital de las entidades financieras posibilidad de la que huyen como de la peste.Entonces, la Compañía de Gestión de Activos, será eso, una gestoría donde se entierren los tochos y acumule pérdidas con cargo al populacho. Un detalle importante, si va a gestionar el ladrillo fallido de la banca ¿No tendría que llamarse Compañía de Gestión de Activos Inmobiliarios? Apuesto cien a uno que estos cabrones no sólo nos endosan los tochos sino que también tienen previsto endosarnos, camufladamente, los créditos morosos que el amiguismo ha dejado de pagar y además, lo que llaman “Reclasificación de créditos”, que no es otra cosa que créditos fallidos de las grandes empresas (varias empresas que cotizan en el IBEX-35 tiene una deuda superior de lo que valen en Bolsa, increíble pero cierto) hasta eso estos malandrines son capaces de endosarnos. ¿Se pueden hacer estas astracanadas cuando no hay dinero para sanidad, farmacia, educación, servicios sociales y una larga lista?  Me queda todavía algo que decir (sé que es más largo de la cuenta pero el asunto es de perentoria necesidad y no vendrá de unos párrafos de más) creo que es importante y jurídicamente delictivo. Espero que algún movimiento, plataforma, asociación o cualquiera lo presente en los Tribunales, son aquellos asuntos que los fiscales se quedan atrapados a pesar que su superior jerárquico ponga mala cara y pretenda enterrar el asunto. Voy al grano, del Memorándum de Entendimiento se puede extraer que el inmobiliario que se transfiera al banco malo será a un “precio razonable de mercado a largo plazo” ¿No estará el presidente del gobierno Mariano Rajoy cometiendo el delito de maquinación para alterar el precio de las cosas?           
Esperaba publicar este artículo una vez que el Consejo de Ministros diera luz verde a la reforma financiera prevista para el 24 de Agosto: la ha aplazado al 31. No espero más y lo publico, no sin antes est ruego. Es del todo necesario, parar los pies al gobierno, a los diputados que lo consientan, a las arpías que pudiendo decir no dicen nada y a todos aquellos que les importa un carajo que el país se vaya hacer puñetas ya que de ello sacaran su rédito. A esta jauría se les tiene que parar los pies en el mismo momento que se produce la agresión, después será demasiado tarde. Quisiera traer a colación la idea de defensa del mariscal Rommel, se empeñó en la construcción del Muro Atlántico, una fortificación que recorría la costa francesa a la espera de contener la invasión de las fuerzas aliadas. Rommel, insistía que si al enemigo no se le paraba en las playas en el momento del desembarco, el momento más vulnerable, ya no se le podría contener al dispersarse en un frente amplio. Esta es la idea que quisiera transmitir, es necesario poner toda la carne en el asador en esta marcha proyectada para el 25 de septiembre que a continuación dejo al pie de este artículo el Manifiesto que he recibido por e-mail. En mi opinión, y teniendo en cuenta la razón que nos acompaña y lo que representa para el país y sus moradores no es propio que el Manifiesto vaya huérfano de adhesiones. Para subsanar esta carencia propongo que sean cientos, quizás miles, conforme pase de mano en mano los suscriptores del mismo. Dejo mi nombre al pie del Manifiesto, espero que tú también lo hagas.

Conste que viene sin origen declarado, nadie convoca.
¡Atención! esta puede ser la próxima y definitiva movilización ciudadana a partir de la cual se inicie el proceso de cambio en el que se deje atrás el régimen vigente y se sienten las bases para una verdadera democracia. La acción es clara y contundente: El próximo 25 de septiembre se llegará a Madrid de forma masiva desde todas partes de España, con el fin de rodear el Congreso de los Diputados y permanecer allí de forma indefinida, hasta conseguir la disolución de las cortes y la apertura de un proceso constituyente para la redacción de una nueva constitución, esta vez sí, la de un estado democrático. Toda la ciudadanía está invitada a participar, ya sea a modo individual o a través de asambleas, plataformas ciudadanas, etc. El cambio es necesario y va a ser liderado por el pueblo.



MANIFIESTO:
Nosotros, personas comunes, hartas de sufrir las consecuencias de una crisis que no hemos creado, nos unimos para redactar este manifiesto e invitamos a toda la ciudadanía del Estado a unirse a las reivindicaciones que reclamamos en él.
Consideramos que la situación ha traspasado todos los límites tolerables y que somos víctimas de un ataque sin precedentes que, utilizando la crisis como pretexto, está arruinando nuestras vidas, y cuyos culpables son quienes se han configurado como una oligarquía intocable, con la complicidad de todas las fuerzas políticas representadas en el parlamento, manipulando todos los poderes del Estado para mantener sus privilegios y enriquecimiento desmedido e ilícito. Ya no hay manera de ocultar que vivimos un gigantesco fraude social, con gobiernos que sistemáticamente nos mienten, haciendo exactamente lo contrario a sus compromisos electorales, y que no hay justicia alguna en los tribunales para los banqueros, políticos y empresarios culpables de la situación. Sólo vemos cómo esta casta implanta políticas que destruyen nuestros derechos y vidas, y cómo somos víctimas de una represión injustificable cuando demandamos un cambio en la situación.
Creemos que el problema es de tal envergadura que su solución ya no pasa por los habituales mecanismos del sistema político, establecidos por esa casta para hacer de nosotros, los ciudadanos, lo que les parece, por lo que, en consecuencia exigimos:
-La dimisión del gobierno en pleno, por engañar al país de modo inconcebible y llevarnos al desastre, así como la disolución de las Cortes y la convocatoria inmediata de elecciones generales.
-Que esas elecciones generales sean para convocar una Asamblea constituyente, a fin de redactar una nueva Constitución, con la participación de todas las fuerzas políticas del país, pues no reconocemos validez alguna a la actual Constitución, redactada por una camarilla a espaldas del pueblo, y que consagró la dominación de los herederos del franquismo y quienes pactaron con ellos. Ha de ser el pueblo quién determine el modelo de Estado en el que quiere vivir, cosa que no sucede con el actual, que nos fue dado por esa camarilla y que responde exclusivamente a sus intereses.
-Una auditoría de la deuda pública de España, con una moratoria del pago de la deuda hasta haber delimitado claramente las partidas que no han de ser pagadas por la nación, pues han servido a intereses privados que utilizaron al país para sus propios fines y no los del conjunto de la ciudadanía española. Igualmente, exigimos el procesamiento de todas aquellas personas que se demuestren sospechosos de tales maniobras, y que respondan con sus bienes en caso de resultar condenados.
-La reforma de la ley electoral, a fin de represente verdaderamente la voluntad del pueblo soberano, cosa que no sucede de ninguna manera con la actual.
-La derogación inmediata de todas las reformas llevadas a cabo por el Partido Popular, pues no sólo son un desastre para el país, sino que han sido impuestas a traición de la voluntad democrática del pueblo.
-Una reforma fiscal justa, que haga pagar más a quienes más tienen. Igualmente, exigimos la derogación de la amnistía fiscal decretada por el gobierno, cuya injusticia es una verdadera burla a los contribuyentes honrados.
-La abolición de todos los privilegios de quienes ejercen responsabilidades políticas, y la implantación de mecanismos de control férreo del desempeño de sus funciones.
-La paralización inmediata de todos los desahucios, y la puesta en alquiler a precios baratos de las viviendas en propiedad de los bancos y cajas que han sido ayudados con fondos públicos.
-El reparto del trabajo existente entre todas, pues es una enorme falacia que haya que trabajar más, falacia sustentada en la avaricia de los grandes intereses y contraria a los de la gente común.
Por todo lo expuesto convocamos a la ciudadanía el día 25 de Septiembre de 2012 a manifestarse de forma indefinida en las puertas del Congreso hasta conseguir la dimisión del Gobierno y la apertura de un Proceso Constituyente, haciendo de éste, el llamamiento de unión de todas las luchas por una Sociedad más justa.
Somos la inmensa mayoría, somos el pueblo, tenemos razón, y no vamos a dejaros pasar.

Adhesiones:
Josep Manuel Novoa Novoa – (el siguiente)
(Se irá informando de todos los pormenores de la acción.)


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